(+34) 937.641.613 - (+34) 685.365.860    info@saludcreativa.com

Dolor emocional: el primer paso es identificarlo

¿Sabemos qué es dolor emocional? ¿Sabemos distinguir el malestar emocional de otras molestias que tengamos? ¿Sabemos notarlo, sentirlo, palparlo, verlo?

Personalmente, creo que requiere de agudizar el “oído”, ese oído que escucha lo que pasa dentro, lo que se mueve ahí en el espacio interno, sin taparlo ni explicarse cosas acerca de eso ni intentar modificarlo, cambiarlo o que no esté.

Dolor emocional es eso que siento -en mi caso- cuando experimento una especie de agobio detrás del cual, mirando más al fondo, aparece. El motivo puede ser algo nimio, poco relevante, pero lo suficientemente resorte para que se movilice.

Me explico… soy persona que a nivel emocional tengo (o tenía) gran movimiento, vamos, propicia a engancharme o quedarme enganchada (lo que se conoce como “rallada”) por poca cosa a veces. ¿Te ocurre o te ha ocurrido algo parecido? Hay a quien le ocurre a nivel de ideas y pensamientos que no puede parar o quitárselos de encima, a mí me ocurre en lo emocional… probablemente muchos de los que se “rallan” a nivel mental, o están rígidos, bloqueados a nivel corporal, también padezcan dolor emocional.

 

Negar el dolor emocional es mal remedio

Me parece que lo peor que se puede hacer con este tema es no verlo como es, ponerle etiquetas encima, frases inspiradoras o frases derrotistas. El dolor emocional es lo que es, punto!

Continuo explicándome… con el paso del tiempo (años) volcada en la auto-observación y el trabajo personal, constato que cuando miro el dolor como quien mira una realidad aplastante, pues eso, entro en contacto con una de mis realidades más verdadera y profunda. Lo de profunda es porque duele, no porque sea algo trascendental, místico o existencial, no.

Duele como duele cuando se tiene un corte, es desagradable (a menos que uno se haga adicto a ello y hasta le coja gustillo que hay quien se envicia, cosa que encuentro desaconsejable).

Así y todo, cuando lo noto, cuando sé que está ahí y fijo mi mirada, mi atención y mi energía en dicho dolor emocional, siento que estoy en contacto genuino conmigo, que atendiendo de verdad eso, me sano! Que cuando lo abrazo tal cual es como es, como quien abraza a un niño pequeño desolado, algo pasa dentro, algo cambia, algo se afloja.

Por lo tanto, no me interesa escapar del dolor emocional huyendo toda la vida de él y de la incomodidad que genera sino que decido, en un acto de valentía, mirarlo y abrazarlo con el máximo de cariño posible. No sé otro camino que verdaderamente sane, de hecho no creo que exista.

 

Mª Rosa Parés Giralt

Uso de cookies

Este sitio web utiliza cookies para que usted tenga la mejor experiencia de usuario. Si continúa navegando está dando su consentimiento para la aceptación de las mencionadas cookies y la aceptación de nuestra política de cookies, pinche el enlace para mayor información.

ACEPTAR
Aviso de cookies

Pin It on Pinterest

Share This